¿Te gustaría conocer el significado espiritual del sobrepeso? ¿En qué situaciones acumulas demasiadas emociones y te guardas tus verdaderos deseos por miedo a sentir vergüenza si te muestras como eres?

Hoy quiero ofrecerte un fragmento de mi libro “Aprende a interpretar con amor los mensajes de tu cuerpo” donde te explico cuál es el significado espiritual que tiene para mí cuando una persona tiene sobrepeso, y lo que puedes hacer para resolverlo, usando mi técnica ATS (Acción Transformadora desde el Síntoma) de 5 pasos.

Si deseas profundizar más, en el siguiente enlace puedes conseguir mi libro y acceder a mis servicios, por si necesitas una ayuda más personalizada:

https://losmensajesdetucuerpo.com/servicios/

¡Un abrazo fuerte!

SOBREPESO: SIGNIFICADO ESPIRITUAL

El sobrepeso aparece cuando se acumula tejido adiposo (grasa) en determinadas partes del cuerpo, en una cantidad mayor de lo normal para esa persona. Si se supera un cierto límite, se considera obesidad. Hay que tener en cuenta que, aunque hay un Índice de Masa Corporal (IMC) que indica ambos problemas, solo se considera un síntoma cuando afecta a la salud de la persona.

1. SIGNIFICADO:

Lo más importante:

El sobrepeso, según su significado espiritual, tiene varias posibles causas, normalmente asociadas con guardarte emociones que te da miedo expresar y relacionadas con un miedo a la humillación. Las más importantes se explican a continuación.

Puede aparecer si te proteges ante los demás cuando tienes miedo de defenderte, poner límites o expresar tus necesidades.

También puede aparecer cuando no te das suficiente amor por dárselo a otras personas, y tu cuerpo va guardando el “amor” que tomas en forma de alimentos por si en algún momento lo necesitas.

Otra posible causa es evitar ser desead@ por otras personas por miedo a sentir demasiado o a no saber decir que no a los demás.

Puedes consultar también el significado de la parte o las partes del cuerpo donde aparece más el sobrepeso, para saber en qué área acumulas más tus emociones y tus miedos.

Tu verdadero deseo:

Deseas, por un lado, expresar más tus emociones y tus necesidades, confiando en que mereces amor y atención; por otro, darte el amor que necesitas en cada momento; y por útimo, permitirte sentir lo que sientes, y ocupar tu lugar en el mundo.

Significado en detalle:

Cuando el cuerpo acumula grasa, te avisa de que estás acumulando emociones desde hace tiempo (los líquidos representan las emociones, y la grasa, emociones más sólidas que permanecen en tu interior) y te indica que te cuesta expresar ciertas partes de tu ser, representadas por las zonas del cuerpo donde aparece más el sobrepeso. Cuanto más grave es el problema (OBESIDAD), más importante es que prestes atención al mensaje que te está dando tu cuerpo.

Las causas de esa acumulación de grasa son varias, pero normalmente están asociadas con haber vivido una herida emocional de miedo a la humillación. Es decir, que una parte de ti quiere expresarse de forma abierta y natural, pero otra parte de tu personalidad tiene miedo de hacer algo que resulte vergonzoso a ojos de los demás, o miedo de que alguien te avergüence si eres tú mism@.

Una de las causas por las que aparece el sobrepeso es que te guardas tus emociones para protegerte de aquellos que temes que te hagan daño (emocional o de cualquier tipo). Te da miedo que vean lo que sientes porque crees que eso te hará más débil, y tratas de evitar que vean tu miedo, tu rabia y tu tristeza. Quizás te gustaría poner más límites a los demás, con firmeza y amor, pero temes no saber gestionar tus emociones si te defiendes o no saber decir que no, y muestras la apariencia de que todo te parece bien, cuando en realidad no es así.

En ese caso, lo que te indica tu cuerpo es que debes empezar a expresar lo que sientes, lo que te molesta, lo que deseas y lo que no deseas, afrontando tu miedo a que otras personas no te entiendan o te juzguen por ello. Permítete sentir, enfadarte o llorar más, y muestra tu vulnerabilidad y tus necesidades reales. Verás que las personas que te quieren lo entenderán, y, si no te quieren de verdad, estarás preparad@ para ponerles límites y seguir tu propio camino.

Otra de las causas del sobrepeso es la creencia de que debes ser siempre buena persona ante los demás, cuidar de las personas que te rodean y no preocuparte demasiado por ti. Al abandonar las necesidades de tu niñ@ interior, inconscientemente tratas de compensar ese amor que no te das con un exceso de alimentos, sobre todo los dulces, que representan el cariño (artificial). Cada vez cargas con más “peso” (tareas que no deseas) para complacer a otras personas, lo cual te hace sentir que no te estás dando tu lugar entre tus seres queridos, y tu sobrepeso es la forma que tiene tu parte inconsciente de decir: “estoy aquí, existo, quiero tener mi espacio entre vosotros”.

Si es tu caso, es importante que empieces a darte verdaderamente tu lugar, eligiendo creer que eres una persona importante en el mundo, que mereces atención y cariño y que no es necesario que lo devuelvas o que hagas constantemente cosas por los demás para recibir amor. Aprende a preguntarle a tu niñ@ interior cuáles son sus necesidades y a cuidarl@ como una madre amorosa cuida de sus hijos. Tienes derecho a no hacer nada por los demás si no te apetece y a disfrutar de lo que te gusta sin culpa y con amor. Si te das tú mism@ el amor que necesitas, verás que el cuerpo no te pide tanto amor artificial en forma de alimentos.

Otra causa por la que puede aparecer el sobrepeso, conectada con las anteriores, es el deseo inconsciente de no ser desead@ por el sexo opuesto (o el que te atraiga) por miedo a no saber decir que no o a sentir emociones que no puedas controlar.

En ese caso, debes aprender a confiar en que sentir emociones y deseos no es malo, que puedes abrazar lo que sientes con amor y que podrás hacer lo que creas conveniente, tanto si es decir que no a una propuesta como si es permitirte actuar tal y como deseas.

En general, el mensaje de tu sobrepeso es que expreses más tus emociones, que te permitas llorar más y sentir más, que aprendas a confiar en que mostrarte vulnerable es también mostrar tu fuerza y tu valor, y que confíes en que mereces cariño y atención incluso cuando haces cosas que a ojos de los demás no parecen adecuadas. Permítete llamar la atención y ocupar tu lugar en la vida de los demás, aceptando tus errores y las partes de ti (y de tu cuerpo) que no te gustan, y aprende a rodearte de las personas que te ayudan a sentirte querid@ y aceptad@, poniendo límites a quien no te respeta como mereces.

2. INVESTIGACIÓN:

Viaja con tu mente al momento en que apareció el síntoma, ayúdate de las preguntas generales (p. 73) y añade las siguientes:

  • ¿En qué momentos acumulas demasiadas emociones y te guardas tus verdaderos deseos por miedo a sentir vergüenza si te muestras como eres, desde poco antes de que apareciera el sobrepeso?
  • ¿En qué situaciones te proteges de los demás, mostrando una apariencia de que todo te parece bien, en lugar de mostrar tus miedos y necesidades reales?
  • ¿De qué personas sientes que no recibes el amor que te gustaría recibir, o crees que no te ven o que no ocupas tu lugar?
  • ¿A qué personas crees que debes agradar para que te den amor, y a la vez crees que nunca recibes lo suficiente para llenarte?
  • ¿En qué contextos tienes miedo a ser desead@ por otra persona por creer que no sabes decir que no o que sentirás demasiadas emociones que no sabrás gestionar?

3. CREENCIAS (erróneas):

Busca las creencias limitantes (normalmente inconscientes) con las que más te identificas, o encuentra en ti algunas similares:

  • “Debo guardarme lo que siento; si muestro mis deseos, mis miedos y mis emociones, pareceré débil y me harán daño”.
  • “No soy capaz de poner límites a los demás ni de decir lo que no me gusta, debo aceptar lo que me digan porque soy demasiado emocional y los demás no me respetan”.
  • “Me da miedo mostrar ciertas partes de mí que no aprecio, creo que voy a sentir vergüenza o me voy a sentir humillad@”.
  • “No me gusta parecer vulnerable o temeros@, es mejor mostrar que puedo con todo y que todo está bien”.
  • “Enfadarse no está bien ni tampoco poner límites, es agresivo y puedo hacer daño a los demás, así que prefiero guardarme mi dolor”.
  • “No debo cuidar de mí mism@; lo correcto es preocuparme siempre más por los demás y cuidar de que todos estén bien, aunque me sienta desatendid@”.
  • “Nadie me da amor y me siento vací@; tendré que hacer más por los demás, a ver si así ven que soy buena persona, que soy importante, y seguro que me darán más amor”.
  • “Algunas partes de mí no me gustan, es normal que nadie me dé amor, no me lo merezco”.
  • “No debería comer las cosas que me gustan tanto, soy una persona horrible y no sé controlarme, debería ser diferente a como soy”.
  • “Me da miedo que alguien me desee, bien porque no sé decir que no si no me apetece tener algo con esa persona, o bien porque me gusta mucho y no quiero sentir lo que siento por si se rompe mi relación actual o pasa algo malo”.
  • “No debo llorar aunque sienta mucha tristeza, porque los que me rodean se van a preocupar o me van a juzgar como una persona débil o llorona”.
  • “Si tengo personas que me juzgan a mi alrededor será que no merezco nada mejor, debo esforzarme más por hacer todo bien y algún día recibiré el amor que necesito”.

4. MENSAJES:

Para cambiar tus creencias puedes usar las siguientes afirmaciones, y te invito a crear las tuyas usando el método general (p. 82):

  • “Tengo derecho a respetar mis deseos y necesidades, y me merezco amor solo por existir”.
  • “Me permito mostrar lo que siento a los demás y afrontar mis miedos, confiando en que todo saldrá bien y en que las personas que me quieren me aceptarán y seguirán en mi vida”.
  • “Cuando muestro mi vulnerabilidad estoy mostrando la verdad del amor hacia mí mism@, y soy fuerte y valiente por hacerlo”.
  • “Me permito ser vulnerable ante los demás y confío en que, si me quieren, me entenderán y me respetarán poco a poco y, si no me quieren ni me respetan, seré capaz de sacarlos de mi vida con firmeza y amor”.
  • “Tengo derecho a ser una persona emocional y a que me vean”.
  • “Puedo ser vulnerable y abrir mi corazón, estoy siempre protegid@ y elijo confiar en que todo saldrá bien”.
  • “Tengo derecho a ocupar mi lugar en la vida y entre mis seres queridos, soy una persona valiosa e importante para el Universo”.
  • “Está bien llorar y está bien enfadarse, todas las emociones son valiosas para el Creador y me permito experimentarlas con amor”.
  • “Cuando expreso lo que siento y lo que deseo, los demás son libres de aceptarlo o no, y yo elijo con quién quiero compartir mi Ser”.
  • “Está bien cuidar de mí y ponerme en primer lugar cuando lo necesito pues, una vez recargad@ de amor, podré ayudar mejor a los demás”.
  • “Solo yo puedo darme el amor verdadero que necesito, y confío en que, si me lo doy cada día, se manifestará también a través de otras personas como reflejo de mi amor”.
  • “Elijo darme cada día el amor que quiero recibir y cuidar de mi niñ@ interior, abrazándol@ con sus miedos, su tristeza, sus deseos y sus partes maravillosas”.
  • “Me merezco siempre todo el amor del Universo. Incluso cuando veo partes de mí que no me gustan, soy dign@ de amor”.
  • “Me permito cuidarme como me gusta y darme el cariño y los alimentos que me hacen sentirme querid@, y aprendo poco a poco a llenarme de mi propio amor”.
  • “Acepto que puedo ser desead@ por otras personas, y confío en que me puedo permitir sentir algo y no hacer nada; o en que puedo hacer lo que deseo y ver lo que pasa; o en que, si no deseo hacer nada, soy capaz de decir que no, con firmeza y con amor”.
  • “Es bueno llorar y liberar mis emociones guardadas, mientras le doy a mi niñ@ el amor que necesita en cada momento”.
  • “Las personas que me critican o me juzgan son un reflejo de mi propio juicio, así que elijo perdonarme y quererme, y decir a esas personas que me merezco cariño y respeto siempre”.

5. ACCIONES:

  • Repite los mensajes de tu cuerpo todos los días.
  • Busca en tu interior el amor que olvidaste darte hace tiempo y empieza a decirte cosas bellas cada día. Siempre estás a tiempo de quererte más.
  • Afronta tu miedo a pasar vergüenza cuando eres tú mism@, de verdad, sin ponerte máscaras de que “todo va bien”. Cuando te permitas mostrar tu tristeza y tu dolor, imagina a tu niñ@ interior y rodéal@ de amor y aceptación. Verás que, aunque otras personas no te entiendan o te juzguen, sentirás muy claramente tu amor, que es el amor del Creador.
  • Cuando estés en situaciones en las que te da miedo ser vulnerable, piensa que la vida te protege y expresa tus miedos y tus necesidades. Observarás que las personas que te quieren, al ver tus miedos y debilidades, te cuidarán más. Y no te preocupes si descubres al hacerlo que la persona no te quiere lo suficiente y trata de aprovechar tu debilidad. En ese momento sabrás la verdad y podrás apartarla de tu camino, poniendo límites con firmeza y amor.
  • Si tienes grasa acumulada, probablemente lleves un tiempo necesitando llorar o sacar emociones acumuladas. Dedica un tiempo, siempre que te sientas triste, a meditar y abrazar con amor a tu niñ@ interior, permitiéndole que llore a través de tus ojos mientras le das todo lo que necesita. Verás que poco a poco el exceso de peso se va disolviendo de forma natural.
  • Cuando tu cuerpo te pida comer dulces o cosas que te hacen sentir bien, trata de no juzgarte por ello y disfrútalo sin culpa, pensando que mereces todo tipo de amor, incluso ese que es un poco artificial. Con el tiempo, y si te das amor, afrontas tus miedos y lloras lo suficiente, verás que empiezan a apetecerte cada vez menos esas cosas y pierdes peso sin esforzarte ni controlar tanto lo que haces.
  • Si te da miedo que te deseen otras personas, averigua cuál es tu mayor miedo, y busca la manera de afrontarlo, dándote confianza con los mensajes del apartado anterior o con los que necesites. Piensa que sentir no significa actuar, y que siempre eres libre de hacer lo que deseas y de no hacer lo que no deseas.
  • Cuando veas que otras personas no te entienden, te juzgan o te tratan mal, trata de entender que seguramente sea porque no saben hacerlo mejor, pero que necesitan ver que no te gusta lo que te hacen, para poder respetarte. Aprende a decirles lo que sientes y lo que quieres, respetando que pueden no querer cambiar, pero sabiendo que siempre eres libre de decir adiós a las personas que no deseas que sigan cerca de ti, porque no son capaces de respetarte tal y como eres.

Expresa más tus emociones y tus necesidades, confiando en que mereces amor y atención, date el amor que necesitas y permítete sentir lo que sientes.

Espero que te haya servido de ayuda, puedes encontrar más información sobre cómo te habla tu alma en la web, y otros síntomas en MI LIBRO.

Te mando un abrazo muy fuerte,

Manuel

Manuel Requena
Manuel Requena