¿Quieres saber el significado espiritual del tic nervioso? ¿Qué parte de tu Ser deseaste expresar, pero te controlaste?

Hoy quiero ofrecerte un fragmento de mi libro “Aprende a interpretar con amor los mensajes de tu cuerpo” donde te explico cuál es el significado espiritual que tiene para mí cuando una persona tiene un tic nervioso, y lo que puedes hacer para resolverlo, usando mi técnica ATS (Acción Transformadora desde el Síntoma) de 5 pasos.

Si deseas profundizar más, en el siguiente enlace puedes conseguir mi libro y acceder a mis servicios, por si necesitas una ayuda más personalizada:

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¡Un abrazo fuerte!

TIC NERVIOSO: SIGNIFICADO ESPIRITUAL

Un tic nervioso es una contracción involuntaria de un músculo del cuerpo, que aparece de forma espontánea e intermitente. Es común en los ojos (párpados), en los brazos, en las piernas o en los dedos, pero puede aparecer en cualquier músculo. El significado también se refiere a los músculos que se contraen y relajan sin control, produciendo un temblor involuntario en brazos, piernas o cabeza.

1. SIGNIFICADO:

Lo más importante:

Cuando aparece el tic nervioso, su significado espiritual te indica que has estado tratando de controlarte en el área especificada por ese músculo y que, de tanto controlar, has llegado a tu límite y por eso pierdes el control del mismo.

Consulta el significado de la parte del cuerpo donde aparece el tic (OJOS, BRAZOS, PIERNAS, DEDOS, MUSLO, etc.).

Tu verdadero deseo:

Soltar el control y mostrarte tal y como eres, aceptándote con amor.

Significado en detalle:

Los músculos del cuerpo nos ayudan a actuar y a expresarnos, y la aparición de un TIC NERVIOSO o de un TEMBLOR MUSCULAR, al ser un movimiento descontrolado, te indica que has puesto un gran esfuerzo mental en controlar tus acciones o tus expresiones durante un tiempo, incluso durante años, pero en esta ocasión has llegado al límite de lo que puedes controlar sin hacerte daño en tu interior, y tu cuerpo te avisa haciéndote perder el control de la parte del cuerpo relacionada con el tema en que te controlas.

Por ejemplo, cuando aparece un TIC EN EL OJO, tu cuerpo te indica que estás controlando tu vista, y evitas ver algo que no te gusta ver, o también puede que te esfuerces en ver demasiado todo, sin permitirte relajarte.

Concretamente, cuando tienes un tic en el ojo izquierdo (ver OJOS: PROBLEMAS), significa que no deseas ver una parte de tu interior que no te gusta, y te controlas para no verlo porque crees que sería horrible o desagradable ser eso que temes, pero tu cuerpo te dice que te atrevas a mirar dentro de ti y veas que puedes abrazar sin temor todo lo que eres, pues eres una maravillosa combinación de aspectos positivos y negativos que te permiten vivir experiencias nuevas que necesita tu alma.

En mi caso, tuve una vez un tic en el ojo izquierdo porque vi que me estaba comportando de forma egoísta en mis deseos de pareja, y quise estar muy atento para no volver a cometer el mismo error, y eso me hacía controlarme demasiado en mis actos, sin dejarme espacio para perdonarme a mí mismo y dejarme cometer errores de nuevo. En cuanto me permití ser yo mismo y cometer errores, se quitó el tic.

Si el temblor aparece en los brazos, quizás te estés impidiendo actuar según tu corazón desea en el presente, y finalmente pierdes el control y por eso aparece el síntoma (ver BRAZOS).

Cuando aparece en las piernas, puede indicarte que deseas avanzar hacia alguna parte en tu futuro, pero te contienes y te frenas, controlando demasiado tus movimientos.

En otro ejemplo de mi experiencia personal, referido a las piernas, a veces siento un fuerte impulso de estirar la pierna hacia delante estando sentado, sobre todo cuando tengo sueño, y normalmente es una indicación de que llevo un buen rato queriendo ir a dormir (avanzar hacia… ¡mi cama!), pero me controlo de hacerlo por creer que debo quedarme hablando, viendo una película, leyendo o por cualquier otro motivo.

En general, el mensaje de cualquier tic nervioso es que dejes de controlarte, y que te permitas mostrar esa parte de ti que desea expresarse de forma natural, incluyendo tus miedos, deseos, emociones, inquietudes y límites, aunque te dé miedo hacerlo.

Normalmente tendrás varios pensamientos relativos a cierta situación, que te angustian y te estresan, pero te resistes a aceptar lo que sientes porque temes lo que los demás pensarán de ti (por eso es habitual que aparezca en el rostro). Sin embargo, cuando comienza el tic consigues llamar más la atención de otros de forma artificial, y por eso debes dejar de preocuparte por su opinión y ser más tú mism@.

Date el derecho de expresarte y de actuar tal y como eres, y acepta con amor la reacción de los demás; verás que vas encontrando poco a poco tu equilibrio interior y tu versión más auténtica.

2. INVESTIGACIÓN:

Viaja con tu mente al momento en que apareció el síntoma, ayúdate de las preguntas generales (p. 73) y añade las siguientes:

  • ¿Qué parte de tu Ser deseaste expresar, pero te controlaste por un miedo relativo al significado de esa parte del cuerpo, poco antes de que apareciera el tic o temblor?
  • Ojos: ¿Qué parte te niegas a ver, o te esfuerzas demasiado en ver, en ti (izquierdo) o en los demás (derecho)?
  • Brazos: ¿En qué situación te controlas y no abrazas a alguien o te impides hacer algo que sientes que quieres hacer, dar o recibir?
  • Piernas: ¿En qué situación te controlas y no avanzas hacia donde realmente deseas?

3. CREENCIAS (erróneas):

Busca las creencias limitantes (normalmente inconscientes) con las que más te identificas, o encuentra en ti algunas similares:

  • Cara: “No debo expresar lo que siento de verdad porque pueden juzgarme, aunque sienta mucho miedo o angustia; debo controlarme”.
  • Ojo izquierdo: “Me preocupa mucho lo que los demás piensen de mí, y no quiero ver ni que vean mis defectos, debo estar muy atent@ y controlarme”.
  • Ojo derecho: “No quiero ver lo que me molesta de otra personas, así que hago como que no me importa y pongo buena cara”.
  • Brazos: “Tengo grandes deseos de expresar mi amor y mi afecto, pero siempre he tenido que controlarme porque mis padres me trataban con dureza y me da miedo expresarme, creo que puedo sufrir”.
  • Piernas: “Deseo enormemente ir a _____ (algún lugar o destino), pero creo que debo controlarme e ir más despacio por si pasa algo malo”.
  • Mano izquierda: “Nunca me he dejado recibir, y ahora me cuesta mucho hacerlo, debo esforzarme por mostrar que no necesito nada”.
  • Mano derecha: “Siempre he dado lo que creía que debía dar, aunque no me gustara, y sigo esforzándome por hacer cosas que no me gustan”.

4. MENSAJES:

Para cambiar tus creencias puedes usar las siguientes afirmaciones, y te invito a crear las tuyas usando el método general (p. 82):

  • “Me permito soltar el control y ser libre, y me acepto tal y como soy en este momento, con mis virtudes y mis defectos”.
  • “Elijo aceptar con amor mis miedos, mis emociones, mis deseos y mis inquietudes, y aprendo a expresarlas cada día más”.
  • “Acepto que puedo ser juzgad@ por los demás cuando no muestro una ‘buena cara’, y me permito ser yo mism@”.
  • Ojo izquierdo: “Me permito mirarme con amor y aceptación, y ver todas las partes de mi Ser que no he querido ver hasta ahora”.
  • Ojo derecho: “Me permito ver a los demás con los ojos del corazón, y expreso lo que siento de lo que veo, mostrando mi parte más humana”.
  • Brazos: “Me permito actuar como siento y expresar el amor de mi corazón, y confío en que todo va a salir bien”.
  • Piernas: “Me permito avanzar hacia donde deseo con alegría y confianza, dejando atrás mis miedos y aprendiendo del camino”.
  • Mano izquierda: “Me permito recibir con amor los regalos que me da la vida, y acepto lo que los demás puedan opinar de mí”.
  • Mano derecha: “Me permito hacer lo que realmente deseo y dar solo por amor y con alegría”.

5. ACCIONES:

  • Repite los mensajes de tu cuerpo todos los días.
  • Observa bien las situaciones en las que aparece más el tic o temblor, y anota las expresiones y emociones que puede que estés controlando en ese momento. Después haz un plan para ir expresándolas poco a poco.
  • Visualiza a tu niñ@ interior y pregúntale qué es lo que teme si expresas tu verdad. Entonces abraza a tu niñ@ y dile que todo va a salir bien, que ya no tiene que ser lo que los demás esperan de él/ella, y que tú le vas a dar todo el amor que necesita.
  • Investiga más posibles mensajes y… ¡ámate!

Suelta el control y muéstrate tal y como eres, aceptándote con amor.

Espero que te haya servido de ayuda, puedes encontrar más información sobre cómo te habla tu alma en la web, y otros síntomas en MI LIBRO.

Te mando un abrazo muy fuerte,

Manuel

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